Hay varias cosas que puedes hacer para mejorar la calidad de tu sueño sin seguir consejos específicos:
Establece una rutina de sueño: trata de dormir y despertarte a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana.
Crea un ambiente relajante para dormir: asegúrate de que tu habitación esté oscura, tranquila y a una temperatura cómoda.
Evita la cafeína, el tabaco y el alcohol: estos pueden afectar tu capacidad para dormir.
Haz ejercicio regularmente: el ejercicio diario te ayudará a sentirte más cansado al final del día.
Usa tu cama solo para dormir: evita usar tu cama para trabajar, ver televisión o usar dispositivos electrónicos antes de dormir.
Relájate antes de dormir: puedes leer un libro, escuchar música relajante o practicar técnicas de relajación para ayudarte a dormir mejor.